El Nilo: tras los pasos de Agatha Christie
En el año 1933 la novelista Agatha Mary Clarissa Miller, conocida como Agatha Christie – fue su nombre de casada tras contraer matrimonio con el aviador Archie Christie- viajó a bordo del Steam Ship Sudan, un barco de vapor que navega por el río Nilo desde 1885. Quedó tan cautivada por la experiencia, que la inspiró a escribir «Muerte en el Nilo», una de sus obras más prestigiosas de la literatura policíaca. Hoy en día, ya en el siglo XXI, en el mismo barco y recreando el mismo recorrido por el Nilo, proponemos hacer el mismo viaje siguiendo los pasos que Agatha Christie y sus personajes hicieron casi cien años atrás.
¿Se puede viajar a Egipto este 2021?
El pasado mes de julio, Egipto abrió de nuevo sus aeropuertos. Algunas aerolíneas han establecido requisitos específicos, como el uso de mascarilla. Para entrar, de momento los viajeros solamente deben acreditar resultado negativo en PCR emitido en las 72h previas a la llegada. Más información en 93 217 95 13.
La novela «Muerte en el Nilo»
La autora británica era una especialista en obras policíacas y de suspense. Era la mejor a la hora de plantear un crimen y resolverlo. A lo largo de su carrera publicó 66 novelas de este genero. Su primera novela fue El misterioso caso de Styles (1920), en la que apareció por primera vez su personaje más legendario: Hércules Poirot.
En 1930 se casó con el arqueólogo Max Mallowan, a quien acompañó largas temporadas en sus viajes a países como Irak, Siria o Egipto. Como decía al principio, en una de esas estancias, en 1936, se fraguó «Muerte en el Nilo», cuyo argumento describe uno de los casos más interesantes a los que se enfrentó la lucidez de Poirot.
La sinopsis de la historia es la siguiente: durante unas vacaciones por Egipto, en una travesía por el Nilo, una joven aparece muerta de un disparo en la cabeza. El detective Poirot será el encargado de tratar de resolver el misterio y de dilucidar cuál de los ocho sospechosos es el asesino.
El hotel Old Cataract
A Agatha Christie le apasionaba viajar y, sobre todo, hospedarse en hoteles de alta categoría, donde se inspiraba y tomaba notas para escribir sus novelas. Durante ese viaje a Egipto en 1933 eligió el hotel Old Cataract, en Asuán, a las puertas del gran desierto de Nubio, para hospedarse.
Este hotel existe todavía y, aunque se ha reformado en gran medida, sigue conservando ese aire glamuroso de los años 30. Se trata de un palacio victoriano del siglo XIX con toques árabes, decorado con mucho estilo y donde también han dormido autoridades como Churchill o el arqueólogo Howard Carter tras descubrir la tumba de Tutankamon.
Esta es nuestra primera propuesta: alojarse en este mítico establecimiento (ahora de la cadena hotelera Sofitel) que, desde su terraza, sigue teniendo unas maravillosas vistas al Nilo, de la Isla Elefantina y del mausoleo del Aga Khan. Por cierto, el hotel diseño en una habitación suite en honor a Agatha Christie y le puso su nombre.
El barco a vapor
Como ya hemos mencionado previamente, el crucero donde se ambienta la novela «Muerte en el Nilo» es el Steam Ship Sudan. Es uno de los barcos más famosos de la historia. Construido en 1885 como regalo para el rey Fouad y puesto en el mar como crucero en 1921, este barco de vapor conserva la gracia Belle Epoque de sus inicios y mantiene su original partida desde Luxor o Asuán o viceversa.
El interior del barco es relativamente pequeño. Pero ésa es la gracia precisamente, puesto que le da una atmósfera íntima que es todo un lujo. Tiene mucho encanto, la verdad. La cubierta superior, las suites Agatha Christie y Lady Duff Gordon, situadas en la proa, ofrecen una vista sorprendente del río. En la popa, se encuentran las suites Aida y Reina Victoria. En total, 5 suites y 18 camarotes. Las cálidas carpinterías, las camas doradas o cobrizas, el mobiliario clásico y el hermoso parqué de tono claro confieren al conjunto un encanto de época; se percibe hasta en el más mínimo detalle.
Pasó una época de olvido, pero en el año 2000 el Steam Ship Sudán fue adquirido por una empresa francesa que lo ha reformado con mucho gusto. Combina lo antiguo y lo nostálgico (se sigue propulsando a vapor) con las comodidades de lo moderno (todos los camarotes disponen de aire acondicionado). Está pensado para 67 pasajeros a bordo en cualquier momento y los 18 tripulantes. Lo dicho, no es un crucero al uso, ni mucho menos, es puro lujo.
De Lúxor a Asuán: los escenarios
Una de las grandes ventajas de navegar con un barco a vapor de como el de «Muerte en el Nilo» es su escaso calado, lo que permite acercarse a aguas poco profundas y a la ribera. Y esta cualidad nos abre tramos menos transitados del Nilo, lo que se suma al exotismo del viaje.
La idea de este viaje es ir haciendo paradas en los puntos más interesantes entre Lúxor y Asuán (puede ser a la inversa). Normalmente, en cada puerto de escala, guías expertos están disponibles para liderar grupos con su gran conocimiento y pasión por la historia del antiguo Egipto.
Lúxor, la antigua Tebas, cuenta con dos de los templos más espectaculares de Egipto: el de Lúxor y el de Karnak, antiguamente separados por la Avenida de las Esfinges, una calzada de tres kilómetros de longitud.
Otra de las visitas imprescindibles es el valle de los Reyes, el templo de Hatsepsut (dedicado a la única mujer que reinó en Egipto durante un largo periodo) y los Colosos de Memnón (dos gigantescas estatuas de piedra que representan al faraón Amenhotep III).
Podéis ver una excursión de un día para no dejaros nada en Luxor aquí
El Templo de Edfu, dedicado al Dios Horus, también es una parada recomendable. Luego el crucero continúa navegando hacia Kom Ombo, donde se alza el increíble templo dedicado a los dioses Sobek y Hareoris.
El Templo de Filae, dedicado a la diosa Isis, es reconocido como uno de los más bellos del planeta. Y desde allí, hay mucha gente que decide dedicarle media jornada a una excursión a los templos de Abu Simbel.
Cena a bordo y puesta de sol de despedida
Entre las dos grandes ciudades del Alto Egipto, Lúxor y Asuán, hay en total 130 millas fluviales, que pasan como un suspiro entre aromas de especias y te, conversaciones en cubierta, atardeceres en silencio y cenas a la luz de las velas.
Las paradas diarias del Steam Ship Sudan garantizan que se puedan recolectar y preparar los ingredientes más frescos para elaborar a bordo los suculentos platos de la gastronomía egipcia. Dependiendo de las condiciones del viaje del día, algunas comidas se toman en forma de buffet (generalmente desayuno y almuerzo), mientras que otras son banquetes de cuatro platos más formales. Las mesas están colocadas con candelabros y manteles blancos. Siempre manda la elegancia y el estilo más sofisticado. La hora de comer a bordo del Steam Ship Sudan es siempre un asunto refinado, seguido a menudo de un trago clásico en el bar mientras se juega a las cartas. Muy al estilo del siglo XIX.
La puesta de sol es seguramente uno de los instantes más mágicos del día en Egipto y, a menudo, implica un descanso muy necesario después de un día de exploración a pie, en todoterreno o en camello. Algunas partes de los itinerarios permiten pasar tiempo en tierra por las tardes, pero a medida que cae la noche, nada mejor que relajarse con una puesta de sol en la cubierta mientras este mundo antiguo y moderno pasa ante sus ojos.
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